Un lugar especial, buena compañía y el mejor gin-tonic


Los ingredientes para la escapada perfecta

Después de una jornada disfrutando de visitas culturales y planes en la naturaleza, lo que te apetece es llegar al hotel, ponerte cómodo y saborear una copa bien preparada, como una ginebra Nordés, elaborada a partir de la destilación de vino albariño y la adición de hierbaluisa, laurel, toxo, hierba caralleira o eucalipto. Sorbo a sorbo para asimilar sin prisas todo lo vivido en el mejor entorno posible, los hoteles Rusticae. Te proponemos 3 hoteles donde disfrutar del mejor lado de la vida.

Quinta de los Cedros (Madrid)

Parece difícil dejar a un lado las prisas y el asfalto en Madrid, pero no imposible. Situado en una de las mejores zonas residenciales de la capital, junto a la calle Arturo Soria, el frondoso jardín del Hotel Quinta de los Cedros es un oasis que invita a desconectar bajo sus cedros centenarios. Después de todo un día descubriendo la ciudad, nada mejor que relajarse tomando una de sus espectaculares copas en la terraza, si es posible con una buena compañía.

Posada de San José (Cuenca)

Otro escenario para disfrutar del lujo de lo auténtico es la Posada de San José, que habita una de las famosas casas colgadas de Cuenca, en pleno corazón del casco histórico. Después de una sabrosa comida o cena en su restaurante, o a media tarde, disfruta de una buena copa en el comedor o en la terraza, con las impresionantes vistas sobre la hoz del río Huécar.

Hoces del Duratón (Segovia)

El hotel Hoces del Duratón se encuentra en el corazón del Parque Natural de las Hoces del Duratón, lo que asegura una escapada con encanto en plena naturaleza segoviana. Para redondear un día en el que las actividades de aventura han sido las protagonistas, además de recargar la energía con la cocina tradicional, relájate en alguno de sus salones y toma sin prisas una buena copa.