Destino Matarraña

Un poco de historia

La comarca del Matarraña ha sido históricamente un nexo entre las tierras de interior y la costa mediterránea. Su proximidad al mar y a las vecinas Cataluña y Valencia, le ha otorgado un carácter mediterráneo y un papel de frontera a lo largo de su historia. El arte rupestre levantino es el primer testimonio que encontramos, declarado Patrimonio Mundial por la Unesco. En los s. VII-VI a.C. se desarrolla la época ibérica, que es uno de los momentos de mayor esplendor de la comarca. La organización actual del territorio tiene origen a finales del s. XII, en tiempo de la reconquista cristiana, que no se hizo definitiva hasta el reinado de Alfonso II. En la Edad Moderna, el aumento del poder municipal se plasma en la construcción de casas consistoriales renacentistas. En este período se asiste también a una especialización en la producción del aceite, con un importante número de prensas donde se realizaba la molienda. Aunque también tuvo que hacer frente a episodios de bélicos, como las guerras carlistas.

foto castillo Valderrobres turismodearagon.com

Valderrobres

Esta comarca de nombre inolvidable está formada por 18 municipios de valioso legado arquitectónico y natural. La capital es Valderrobres, población situada en una colina junto al río Matarraña. Su puente de piedra y majestuoso portal de San Roque conducen a un casco antiguo de puro sabor medieval, con calles empedradas, plazas y soportales. En la plaza mayor destaca su ayuntamiento renacentista, que cuenta con una reproducción en el Pueblo Español de Barcelona, y diversas casas palaciegas. Ascendiendo por sus calles se llega al castillo y a la iglesia de Santa María la Mayor.

foto turismodearagon.com

Calaceite

Si Valderrobres es la capital administrativa, Calaceite es la capital cultural del Matarraña, cuyo conjunto histórico-artístico está declarado Bien de Interés Cultural. Es una delicia pasear por sus calles, que muestran el tono dorado de la piedra y el color pardo de los tejados. Sorprenden sus numerosas casas señoriales, capillas, ermitas, portales y su bello ayuntamiento renacentista. No hay que marcharse sin recorrer la calle Mayor, la plaza de España, la calle Maella, así como visitar la iglesia de la Asunción y el Museo Juan Cabré, máximo representante de las excavaciones arqueológicas de la comarca.

Otros Pueblos

La Fresneda es otro conjunto histórico-artístico que vale la pena visitar. Sus empinadas calles desvelan edificios de gran valor, como la Casa Consistorial renacentista, el Palacio del Marqués de Tosos o el Palacio de la Encomienda. Hay que detenerse a contemplar los soportales de la calle Mayor y la plaza Mayor, para luego tomar fuerzas y visitar la iglesia de Santa María la Mayor y los restos del antiguo castillo calatravo. Rodeada de campos de vid y olivo, la localidad de Cretas destaca por sus nobles edificios bien conservados, construidos con recios sillares, balcones y aleros de madera. Esta villa medieval fue propiedad de la orden de Calatrava, aunque posteriormente fue vendida al Obispado de Tortosa. Otros pueblos de interés de la comarca son Peñarroya de Tastavins, Fuentespalda, Torre del Compte, Ráfales o Monroyo.

foto monroyo.es

Arte Rupestre Levantino

El arte rupestre levantino es el primer testimonio que encontramos en la comarca y está declarado Patrimonio Mundial por la Unesco. El arqueólogo calaceitano Juan Cabré descubrió en 1903, en el Barranco del Calapatá (Cretas), el primer conjunto de estas manifestaciones pictóricas naturalistas en la “Roca dels Moros”. En la actualidad se conservan dos estilizaciones humanas, así como la parte trasera de un ciervo, un arquero levantino y un cuadrúpedo, que formarían una escena de caza. Otras pinturas que se pueden visitar son las de La Fenellassa, en Beceite, que muestran a cuatro jinetes que cabalgan de pie sobre cuatro équidos, y Els Gascons, en Cretas, con dos cabras pintadas en tintas planas en color negro, de marcado carácter naturalista.

Foto La Fenellasa mataranyaturismo.es

Ruta de las Cárceles

En prácticamente todos los pueblos del Matarraña se puede visitar una antigua cárcel, ya que todas se encuentran en buen estado de conservación. La antigua cárcel de Mazaleón se encuentra en el interior del ayuntamiento viejo y es una de las mejor conservadas. En la planta baja se puede ver un calabozo y en la segunda planta, uno de los objetos más llamativos de toda la ruta, un gran panel lleno de inscripciones y dibujos realizados por los presos durante el siglo XVIII. En La Fresneda se construyeron varias cárceles, como la de la calle Mayor o la del ayuntamiento, en la que hay más inscripciones y las antiguas letrinas. En la cárcel de Ráfales, las celdas están excavadas en el suelo formando un pozo que se cerraba con unos maderos en la parte superior. Otras antiguas cárceles de la ruta son las de Fuentespalda, Torre del Compte, Monroyo, Calaceite o Peñarroya de Tastavins.

foto matarranyaturismo.es

Fiesta de Sant Antoni

La víspera del 16 y día 17 de enero en la mayor parte de los municipios de la comarca del Matarraña se celebra la fiesta de Sant Antoni, una antigua tradición que ha sido declarada Fiesta de Interés Turístico de Aragón. Sant Antoni Abad es el patrón de los animales domésticos y de labor, santo protector de los cultivos y de los animales relacionados con los labradores. De ahí que se celebre la fecha con el encendido de hogueras y la bendición de animales y ofrendas de productos típicos de la tierra. En Valderrobres, tras la procesión del santo, se recitan “los dichos”, que es un repaso en tono satírico a los acontecimientos más relevantes que se han producido durante el año en la localidad. En La Fresneda, La Portellada o Torre del Compte salen los diablos o “diablets”, cuya misión es animar la fiesta y asustar a los niños que se encuentran en las calles. Y en la localidad de Torre de Arcas es tradicional “La Esquellada”, donde los niños recorren el pueblo haciendo sonar esquilos o “esquelles” para que los vecinos les den pastas y dulces.

foto matarranyaturismo.es

Naturaleza

La riqueza natural del Matarraña es palpable en cada uno de sus municipios. El conjunto es como un oasis en medio de la fría y árida provincia de Teruel, dominada por el altiplano. Aquí el paisaje es más frondoso y verde bajo el influjo mediterráneo, destacando los bosques de pinos, las peñas, los ríos y los saltos de agua. Un entorno ideal para realizar rutas de senderismo y ciclismo, como en la Vía Verde de la Val de Zafán. Entre sus espacios naturales sobresalen los Puertos de Beceite, el pantano de la Pena, el salto de agua de El Raig, el barranco de la Val Rovira, el Monte de San Cristóbal, los Roques del Masmut, la Peña del Cuervo o los barrancos de Calapatá, Gascons y del Caderer.

foto Puertos de Beceite turismodearagon.com

Gastronomía

Recorriendo la comarca del Matarraña, uno se da cuenta del predominio de campos de olivos, viñas y almendros, lo que da muestra de la importancia que tiene en esta zona la agricultura y cuál es la base de su gastronomía. El aceite de oliva del Bajo Aragón es el producto estrella, especialmente el de Calaceite, aunque también sobresalen las aceitunas negras, los vinos, el melocotón de Calanda, los embutidos, los quesos, la miel, el jamón de Teruel, el ternasco de Aragón, la trufa negra o las almendras, con las que se hacen postres tan sabrosos como los secalls o la tarta de almendra. A la hora de comer en un restaurante de la zona, podrás probar platos como el estofado de ternasco de Aragón, cordero a la pastora, crespells, coques de pimiento o magre en tomata.

foto Coques con pimiento matarranyaturismo.es

Dónde dormir

En la comarca del Matarraña disponemos de 5 hoteles Rusticae para que recorras su geografía mientras descansas en lugares con mucho encanto. En Monroyo te esperan las casas cubo del hotel Consolación, acristaladas y mimetizadas con el paisaje de pinos y carrascas, ofreciendo las mejores vistas de los Puertos de Beceite. En Fuentespalda se encuentra el hotel Mas de la Serra, una casa rural con todas las comodidades de un hotel boutique, rodeada de jardines, campos de almendros, roble y bosques de pinos. En el casco medieval de Valderrobres, la capital de la comarca, puedes alojarte en los apartamentos El Racó de Vall de Roures, que combinan la piedra y madera originales con materiales actuales y todas las comodidades. Por último, en Calaceite se encuentran el hotel Cresol, un antiguo molino de aceite de principios del siglo XVIII, y el hotel del Sitjar, una casa solariega del siglo XVIII junto a la antigua muralla y en la plaza Mayor de la villa.

Foto Consolación en Monroyo