EL PLACER DE CONVERSAR EN UN PATIO CASTELLANO
Almodóvar, La Mancha y el color, es lo mismo que da lo mismo. Por el Patio imponente de la Casa que debe su nombre a la Tía Cuqui, tía abuela de la familia, ha pasado mucha gente pero sobre todo muchas historias de película: desde las batallas de la guerra civil hasta todo lo que acontecía en el pueblo de Orgaz. Y claro, el patio de claustro de madera y fuertes columnas romanas invitaba e invita a recogerte con los tuyos.
LA ALBERCA
NO HAY PUEBLO SIN ALBERCA
En lo que antes se llamaba “el corral”, hoy se alza una alberca pequeña pero con mucha personalidad.
Hay además una barbacoa y vegetación. Ideal para comer al aire libre
EL COLOR
LA CASA
El color en las vigas de madera, en las estancias y en las habitaciones le da el contrapunto a lo manchego manchego.
Una exaltación de color que rejuvenece tantos años de historia, más de 300 seguro.
La casa es enorme pero acogedora, porque no podría caber en menor tamaño el homenaje que la tía Cuqui se merece. La alma mater que siempre habitó esta casa. Hay que darse prisa, la casas como la de la Tía Cuqui están en peligro de extinción y es un privilegio que la familia lo quiera compartir con nosotros. Orgaz es, además, uno de diez pueblos más bonitos de La Mancha.
